En este espacio ya hemos hablado con anterioridad sobre Proptech, sobre su impacto y beneficios.

Sin embargo, todo indica que este año ya no se hablará sobre lo que puede llegar a ser, sino lo en lo que se ha convertido.

A modo de antecedente, a partir del 2017 es que tenemos los primeros indicios de interés en Proptech en México; desde ese punto, México se ha vuelto el segundo mercado más grande de latinoamérica (detrás de Brasil).

A pesar de lo anterior, el mercado no se había consolidado lo suficiente como para que las Proptech sean una opción suficientemente atractiva para los inversionistas de riesgo.

Eso ha cambiado; tan sólo en 2021, se han recaudado más de 1,300 mil millones de dólares en capital de riesgo para el mercado de Proptech. Si lo comparamos con la inversión realizada en 2020, que fue de 261 millones de dólares, estamos hablando que aumentó 5 veces en 2021.

La consolidación del mercado de Proptech en Latinoamérica puede deberse a muchos factores; primero, que al ser un mercado emergente, los requisitos (tanto legales cómo monetarios) son menores que los requisitos en países donde esta tendencia ya no es tendencia, si no norma.

El segundo, es que muchos de los problemas que han sido resueltos en mercados consolidados, son los mismos o muy similares a los problemas que se encuentran en este mercado emergente.

En tercer lugar, pero no menos importante y relacionado con el anterior, es la solución dinámica de problemas que las Proptech pueden traer al mercado. Un ejemplo es el muy importante puede ser apoyar a los brokers inmobiliarios con distintas herramientas para que estos puedan ser más eficientes. Otro, sería utilizar la blockchain para hacer la transmisión de propiedad más eficiente y rápida.

El panorama

La cantidad de actores en este mercado está creciendo diariamente, así cómo la cantidad de posibles inversionistas; de la mano de los anteriores, también se está dando la profesionalización de este servicio a través de distintos softwares y aplicaciones, que no solamente facilitan las operaciones, si no te brindan la confianza necesaria para cerrarlas.

Adicional a lo anterior, las nuevas formas de financiamiento empezarán a permear en el mercado existente, permitiendo que más clientes accedan a más financiamiento para participar en este nuevo mercado.

Las oportunidades también existirán para los brokers inmobiliarios; la digitalización y profesionalización del broker vía nuevas tecnologías empoderará y facilitará la ejecución de la labor de estos, sin desacreditar su profesión.

En el apartado de arrendamiento, existen nuevas formas de concretar un arrendamiento, vía aplicación móvil y con sólo unos clics. Por otro lado, la inteligencia artificial empezará a mostrar sus beneficios, facilitando la búsqueda y acceso a información para las partes involucradas.

Por último, las “propiedades fraccionadas” podrán parecer una excelente opción para quienes gustan de los tiempos compartidos o adquirir inmuebles con amigos.